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Devocional: Crezcamos de Fe en Fe

¡Ésas sí son buenas nuevas!

Kenneth Copeland
«Acontecerá en aquel tiempo que su carga será quitada de tu hombro, y su yugo de tu cerviz, y el yugo se pudrirá a causa de la unción.»
(Isaías 10:27)

Desde la caída del ser humano, el diablo ha utilizado a las personas como mulas de carga. Él ha puesto su yugo alrededor de sus cuellos y los ha cargado con pecado, enfermedad, fracaso, pobreza y todo tipo de daño que el infierno produce.

Todos hemos sentido el terrible peso de ese yugo. Hemos experimentado el dolor y la frustración que produce el ser liberado del peso de una carga, sólo para que el diablo nos dé un halón y nos ponga más carga.

Por miles de años, ese yugo de esclavitud fue la ineludible tragedia de la existencia de la humanidad. En lo natural parecía que no había salida. Pero mediante el Espíritu de Dios, el profeta Isaías observó más allá y vio que un redentor venía. Uno que finalmente nos liberaría de la opresión de Satanás.

A fin de apreciar por completo cuán buena es esa noticia, observe que Isaías no dijo que el yugo sería “quebrado” a causa de la unción. Y muchas personas lo leen de esa manera; sin embargo, éste afirma que el yugo sería destruido.

Cuando usted busca ese término en el idioma hebreo, descubrirá que la traducción de la palabra destruido es: “absolutamente inútil”. Es posible reparar un yugo quebrado y colocarlo de nuevo. No obstante, Isaías declaró que esa unción aniquila el yugo del diablo por completo, al punto que ¡no queda evidencia alguna de que hubiera estado alguna vez en su cuello!

Eso significa que cada vez que usted le permite a la unción de Dios destruir cualquier clase de yugo en su vida —ya sea en su salud, en sus finanzas, en sus relaciones personales o en su pasado— éste es literal y totalmente destruido, y no se puede restaurar para usarlo de nuevo. El diablo no puede recogerlo y atarlo a usted de nuevo en esclavitud. A quien el Hijo liberta, ¡es verdaderamente libre! 

¡Ésas sí son buenas nuevas!

Lectura bíblica: Números 13-14; Juan 4

Acerca de:Kenneth Copeland

Kenneth Copeland

Kenneth Copeland es cofundador y presidente de los Ministerios Kenneth Copeland en Fort Worth, Texas, y autor de varios libros entre los cuales se incluyen: LA BENDICIÓN del Señor enriquece y no añade tristeza con ella, y Honor: viviendo en honestidad, verdad e integridad.
Desde 1967, Kenneth ha ministrado el evangelio de Cristo y enseñado la Palabra de Dios como maestro. Adicionalmente, ha grabado discos como cantante y recibido premios por sus álbumes: Only the Redeemed (también nominado al premio Grammy), In His Presence, He Is Jehovah, Just a Closer Walk y Big Band Gospel. Como actor en su papel de Wichita Slim, es coprotagonista de los videos infantiles: The Gunslinger, Covenant Rider, y de la película: The Treasure of Eagle Mountain. Asimismo, personificó el papel de Daniel Lyon en los videos Commander Kellie and the Superkids:™ Armor of Light, y Judgment: The Trial of Commander Kellie. También es coprotagonista en las películas The Rally (estrenada en el 2009) y The Rally 2: Rompiendo la Maldición (estrenada en el 2016), en su papel de padrino hispano.
Con la ayuda de su equipo y oficinas en los Estados Unidos, Canadá, Inglaterra, Australia, Sudáfrica, Ucrania, Singapur, y la flamante inauguración de la oficina para Latinoamérica en Colombia, Kenneth está cumpliendo su visión de predicar con valentía la Palabra incorruptible de Dios desde la cima más alta hasta el valle más profundo, y en todos los confines de la Tierra. Su ministerio alcanza a millones de personas en el mundo por medio de programas televisivos semanales, revistas, mensajes en audio y video, convenciones y campañas, y a través de la red mundial internet.