Por Kenneth Copeland
“¿Cómo debo orar por el gobierno?” Esa es una pregunta que muchos cristianos se hacen. Lamentablemente, cuando se trata de política, generaciones de personas han afirmado lo siguiente: “Solo esperamos que este partido político pueda arreglar este lío…”. o “Solo esperamos y oramos para que tal y tal grupo pueda arreglarlo”. Bueno, los políticos, independientemente de su afiliación política, no son Dios. Solo están aquí para gobernar, y el gobierno no puede crear ni cambiar nada de forma permanente.
El cambio real, ya sea en el ámbito político, económico o espiritual, solo sucede cuando la Iglesia comienza a orar y creer en Dios. Nosotros somos los que tenemos autoridad espiritual, y se nos ha dado esa autoridad por el Nombre de Jesús.
El problema es que no hemos sabido qué hacer con ella.
Ora por el Gobierno dando Gracias
Cuando se trata de orar por el gobierno, primero debemos recordar 1 Timoteo 2:1-2 (NTV). En estas escrituras, el Apóstol Pablo explicó nuestra responsabilidad como ciudadanos del cielo y ciudadanos de la tierra: “En primer lugar, te ruego que ores por todos los seres humanos. Pídele a Dios que los ayude; intercede en su favor, y da gracias por ellos. Ora de ese modo por los reyes y por todos los que están en autoridad, para que podamos tener una vida pacífica y tranquila, caracterizada por la devoción a Dios y la dignidad”.
A lo largo de los años, el Cuerpo de Cristo se han ignorado la parte de acción de gracias de las instrucciones de Pablo en relación con el proceso político. Cuando el candidato que queremos gana o pierde, a menudo dejamos de orar y definitivamente no le damos gracias a Dios por él. Podemos orar por un puñado de funcionarios electos de vez en cuando. Pero, ¿cuánto tiempo pasa desde que dejamos de orar hasta que nos damos la vuelta y comenzamos a criticarlos en nuestras conversaciones?, en la Palabra de Dios, eso no funciona.
Ora por el Gobierno Constantemente
No importa si la persona por la que votamos llega al cargo o no. Lo que importa es nuestra obediencia a la PALABRA de Dios: orar, hacer peticiones e interceder por todos los hombres y mujeres, reyes y líderes con altos cargos, y luego dar gracias a Dios por ellos. Eso no significa que tengamos que ayunar y orar 40 días y 40 noches cada año electoral. Simplemente podemos comenzar pasando de 10 a 15 minutos cada día orando por nuestras autoridades.
El punto es que las oraciones y acciones de gracias deben ser consistentemente el enfoque principal y el esfuerzo de nuestras peticiones, porque el verdadero poder espiritual radica en la coherencia: orar en el espíritu día tras día, permanecer firmes en la Palabra, alabando y adorando a Dios con respecto a nuestras autoridades.
Recuerda, los cristianos deben saber cómo orar por el gobierno, y comienza con acción de gracias y constancia. ¡Somos nosotros los que tenemos la autoridad real aquí, y nuestros países dependen de nosotros!
7 Pasajes Bíblicos con los que Puedes Apoyar en Oración a tu Gobierno
Como cristiano nacido de nuevo, tu juegas un papel importante en el éxito de tu gobierno, ya sea local, estatal o nacional. Además de votar, debes defender con fe a los hombres y mujeres que ocupan puestos de liderazgo.
Aquí tienes siete versículos que puedes usar al orar por tu gobierno:
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1 Timoteo 2:1-2 (PDT) : “En primer lugar, te ruego que ores por todos los seres humanos. Pídele a Dios que los ayude; intercede en su favor, y da gracias por ellos. 2 Ora de ese modo por los reyes y por todos los que están en autoridad, para que podamos tener una vida pacífica y tranquila, caracterizada por la devoción a Dios y la dignidad.”
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1 Pedro 2:17 (NTV): ” Respeten a todos y amen a la familia de creyentes.[a] Teman a Dios y respeten al rey.”
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Salmo 22:28 (PDT): “Porque el reino es del SEÑOR; él gobierna a todas las naciones.”
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Proverbios 11:14 (DHH): “Si no hay buen gobierno, la nación fracasa; el triunfo depende de los muchos consejeros.”
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Proverbios 21:1 (TLA): “En las manos de Dios los planes del rey son como un río:
toman el curso que Dios quiere darles.”
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2 Crónicas 7:14 (RVC): “si mi pueblo, sobre el cual se invoca mi nombre, se humilla y ora, y busca mi rostro, y se aparta de sus malos caminos, yo lo escucharé desde los cielos, perdonaré sus pecados y sanaré su tierra.”
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Proverbios 28:2 (NBV): “Cuando hay rebelión en un país se multiplican sus dirigentes; pero el gobernante con sabiduría y entendimiento mantiene el orden.”
Se diligente en orar por tu gobierno y aquellos en posiciones de autoridad. ¡En solo 10-15 minutos al día, tu y otros creyentes pueden cambiar el curso de la historia!