Estar firme en fe por tu nación es un llamado diario de obediencia a la Palabra de Dios, pero ¿cómo lo haces? Aquí hay tres maneras en las que puedes permanecer en fe por tu nación hoy.
El tema de la fe por tu nación es típicamente uno que se plantea durante una elección importante. Está presente en nuestras mentes; está en las noticias; es de lo que todo el mundo está hablando. Pero, ¿y el resto del tiempo? ¿Se supone que debemos simplemente volver a la indiferencia, esperando cuatro años para la próxima gran elección?
¡Absolutamente no! Mantenerte en fe por tu nación es necesario todos los días. Mientras trabajas, te relajas o cocinas, el gobierno está en movimiento, los tribunales están en sesión y las leyes del país están siendo moldeadas y cambiadas.
¿Qué significa eso para ti como cristiano? Principalmente: Tu participación es necesaria en esta hora. Este no es el momento de retroceder. Como Cuerpo de Cristo, necesitamos estar informados y mantener nuestra fe comprometida.
¿Te preguntas cómo puedes marcar la diferencia? Aquí hay 3 maneras de permanecer en fe por tu nación.
1. Levántate y Vota
“Cuando los justos tienen el poder, el pueblo se alegra; pero cuando los malvados tienen el poder, el pueblo sufre”. –Proverbios 29:2 (NBV)
Los cristianos y la política son una mezcla ordenada por Dios. El Salmo 8:6 dice, “Le hiciste [al hombre] para que se enseñoreara de las obras de Tus manos; Todo lo has puesto bajo sus pies”. El dominio no es solo un privilegio y un honor, es una responsabilidad. Tener dominio es tener mayordomía. Estamos llamados a ser buenos administradores de nuestro dinero, matrimonio, niños, mascotas y de nuestro gobierno. Participamos en la administración del gobierno a través del Voto.
Muchos cristianos afirman que su voto no marcará la diferencia o deciden abstenerse de votar debido a los defectos de carácter de los candidatos. Pero, ¿es esto aceptable a los ojos de Dios? En Lucas 19:13, Dios nos dijo que hiciéramos negocios y que nos ocupáramos de las cosas hasta que Él regrese. Parte de esta responsabilidad implica la administración activa de nuestro proceso de gobierno. En Mateo 25:14-28, vemos que el mayordomo que no hizo nada fue el que fue reprendido y castigado. Eso significa que los cristianos no pueden elegir no participar, no es opcional.
El obispo Keith Butler lo expresa de esta manera: “Génesis 8:22 dice: ‘Mientras quede la tierra, la siembra y la siega… no cesarán’. Y votar es parte del principio de la siembra y la siega”.
Tu voto (o no voto) promoverá o retrasará el avance del mal. ¡No puedes darte el lujo de no dejar que tu voz sea escuchada! Como dice David Barton: “Detienes la mayor cantidad de maldad que sea posible, cada vez que tienes la oportunidad”.
2. Hazle Oposición a la División en tu Nación
“Les suplico, hermanos, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que todos vivan en armonía y que no haya divisiones entre ustedes, sino que se mantengan unidos en un mismo pensar y en un mismo propósito.” –1 Corintios 1:10 (NVI)
Satanás está haciendo todo lo posible para arruinar tu nación, y está usando un arma: la división (Marcos 3:25). ¡Pero no tenemos que dejar que se salga con la suya! Podemos enfrentarnos a la división en unidad.
Como cristianos, debemos mantenernos firmes contra este tipo de división y mirar a las personas como Dios las ve: como individuos únicos. Dios no mira el color, el género o cualquier otro factor. Ve a las personas en dos grupos: los que lo conocen y los que no. Esa es la única forma en que estaremos divididos al final cuando Jesús venga.
¿Cómo se puede combatir la división?
Comienza por negarte a pensar como lo hace el mundo. No permitas que la división entre a tus círculos más cercanos, Mantente firme en la familia de la fe en TODAS las cosas.
Cuida tu corazón con la información que los medios quieren darte. Los medios de comunicación están sembrando discordia, envidia y división. Necesitamos mantener nuestra mente fija en lo que es bueno, amable, justo y de buen nombre (Filipenses 4:8).
“Para volver a la unidad… hay que llevar la Palabra de Dios a su lugar más alto. Y el lugar al que pertenece, el más importante de nuestras vidas, este es nuestro estándar de vida, esto es lo que creemos”. –Obispo Keith Butler
3. Permanece en Oración por los Líderes de tu Nación
“AMONESTO pues, ante todas cosas, que se hagan rogativas, oraciones, peticiones, hacimientos de gracias, por todos los hombres; Por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad.”—1 Timoteo 2:1-2 (RVA)
Incluso ahora, puedes efectuar cambios en tu nación… sin siquiera salir de casa. Mientras oras y te mantienes firme en la Palabra de Dios para que se lleven a cabo Sus planes, puedes confiar en que “la oración ferviente del justo tiene gran poder y produce resultados maravillosos” (Santiago 5:16).
Cuando pongas en práctica estas tres formas de defender con fe a tu nación, sembrarás tu semilla al votar por hombres y mujeres justos. Además, te opondrás a la división y votarás por aquellos que también lo hagan, y orarás por todos los hombres y especialmente aquellos en autoridad. Cuando permaneces en fe por tu nación, serás un mayordomo fiel de la preciosa semilla que Dios te ha dado. Entonces, tendrás paz en tu tierra y gran éxito en tu propia vida.