«Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos.»
(Isaías 55:8-9)
Si usted desea conocer de una manera precisa cuál es el camino de Dios, entonces será mejor que se familiarice con Sus altos caminos, en vez de familiarizarse con los bajos caminos del mundo. Enfoque su tiempo y atención en Dios y en Su Palabra.
Jesús vivió de esa manera. La Biblia declara que Él se levantaba mucho antes del amanecer a orar. Algunas veces pasaba toda la noche conversando con Dios.
Jesús convirtió en Su principal prioridad el hábito de pasar tiempo con Dios. De esa manera, supo qué deseaba Su Padre que llevara a cabo. Así también, Él lo agradaba de una manera perfecta. Jesús le dedicaba tiempo a Dios.
Los discípulos de Jesús lo sabían al observar Su estilo de vida, y también eran conscientes de que Su poder estaba relacionado por el tiempo que invertía orando. Por esa razón, ellos le pidieron: «…Señor, enséñanos a orar…» (Lucas 11:1).
Las instrucciones que Jesús recibió en ese entonces de parte de Dios, no siempre fueron fáciles. En el Getzemaní, Él sudó sangre y expresó: «…Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero, sino como tú» (Mateo 26:39).
Es probable que usted se encuentre en algún tipo de Getzemaní ahora mismo, talvez Dios le esté diciendo algo que su carne simplemente no quiere hacer. A lo mejor desde hace varios meses, el Señor le ha estado indicando que se levante temprano por las mañanas, a fin de invertir más tiempo en oración y en la Palabra. Y usted ha pensado: “Sí, realmente yo debería hacerlo…”, y luego desactiva la alarma y se vuelve a dormir.
Quizá, Dios le ha estado pidiendo que realice ciertos cambios en su vida. Es posible que Él le esté diciendo: Puedes solucionar ese problema de este modo. Esto es lo que debes cambiar.
No importa lo insignificante que le parezcan las instrucciones que Dios da en este momento, usted debe tomarlas con seriedad. Es importante que las obedezca. Es posible que éstas lo ayuden a evitar serias consecuencias el día de mañana. Las indicaciones de Dios son siempre para obtener el mejor beneficio en su vida.
Si usted pasa tiempo con Él, aprenderá a encontrar Sus caminos, entonces olvidará los bajos caminos del mundo.
¡Usted aprenderá a tomar el camino de Dios!