fbpx

Devocional: Crezcamos de Fe en Fe

El Sumo Sacerdote de nuestra confesión

Kenneth Copeland
«Por tanto, hermanos santos, participantes del llamamiento celestial,
considerad al apóstol y sumo sacerdote de nuestra profesión, Cristo Jesús»
(Hebreos 3:1).

Una vez que usted comprenda que ha nacido de nuevo, y que se le ha entregado la naturaleza de Dios; la pregunta que surge de inmediato es: “¿Cómo consigo expresar esa nueva naturaleza que llevo en mi interior? ¿De dónde obtengo el poder para apartar los deseos de mi carne, a fin de que pueda de continuo vivir en amor?”.

La respuesta la encuentra en Hebreos 3:1. Usted recibe ese poder de: Jesús, el Apóstol y Sumo Sacerdote de su confesión.

Un apóstol es una persona que ha sido enviada para un propósito. Por ejemplo, si usted le da dinero a alguien y lo envía a la tienda a comprar pan, esa persona será su apóstol en la abarrotería. Por tanto, el término apóstol, no denota santidad. Sin embargo, cuando Dios envía a alguien y lo equipa para cumplir una tarea, ser un apóstol se vuelve algo sobrenatural. A eso añádale el concepto del Sumo Sacerdote, quien es alguien designado por Dios con la autoridad para hacer que Su PALABRA se cumpla en beneficio del pueblo, y con todos estos ejemplos usted puede tener una idea de lo que Jesús lleva a cabo por nosotros.

Él ha sido enviado por Dios, a fin de que ¡nuestra confesión de fe se cumpla! Por ejemplo, cuando lo confesamos como SEÑOR, Él, como el Sumo Sacerdote de esa confesión, hizo que el nuevo nacimiento se cumpliera en nuestra vida. Cuando declaramos: Jesús, ¡ven a mi corazón! Te recibo como mi SEÑOR, Cristo administró el poder necesario para convertirnos en nuevas criaturas —y al instante, las cosas viejas pasaron y ¡ todas fueron hechas nuevas!—.

Más tarde, después de aprender que Jesús había comprado nuestra sanidad, pudimos confesar en fe: SEÑOR Jesús, creo que por Tu llaga fui sanado. Por consiguiente, ¡yo creo, y recibo mi sanidad! Cuando lo declaramos, Jesús —como el Sumo Sacerdote de nuestra confesión— se encargó de que esas palabras de pacto, las cuales expresamos, se cumplieran y fuéramos sanos.

De la misma forma, una vez que hayamos comprendido que el amor de Dios ha sido derramado sobre nuestro corazón por medio del Espíritu Santo, podemos recurrir a ese amor al realizar la siguiente confesión de fe: SEÑOR Jesús, creo que he sido hecho partícipe de la naturaleza divina. Creo que el amor de Dios habita en mí, y que vivo en ese amor. Recibo el poder para vivir conforme a éste, ¡ahora!

Cuando realizamos una confesión como esa, Jesús obra como el Sumo Sacerdote de nuestra confesión y utiliza Su autoridad para hacer que se cumpla lo que pedimos. Él libera toda la gracia que necesitamos para expresar Su naturaleza en nuestro interior. Administra todos los recursos espirituales necesarios, para permitirnos vivir en nuestra confesión de fe. Él nos otorga el poder para disfrutar una vida de amor.

Acerca de:Kenneth Copeland

Kenneth Copeland

Kenneth Copeland es cofundador y presidente de los Ministerios Kenneth Copeland en Fort Worth, Texas, y autor de varios libros entre los cuales se incluyen: LA BENDICIÓN del Señor enriquece y no añade tristeza con ella, y Honor: viviendo en honestidad, verdad e integridad.
Desde 1967, Kenneth ha ministrado el evangelio de Cristo y enseñado la Palabra de Dios como maestro. Adicionalmente, ha grabado discos como cantante y recibido premios por sus álbumes: Only the Redeemed (también nominado al premio Grammy), In His Presence, He Is Jehovah, Just a Closer Walk y Big Band Gospel. Como actor en su papel de Wichita Slim, es coprotagonista de los videos infantiles: The Gunslinger, Covenant Rider, y de la película: The Treasure of Eagle Mountain. Asimismo, personificó el papel de Daniel Lyon en los videos Commander Kellie and the Superkids:™ Armor of Light, y Judgment: The Trial of Commander Kellie. También es coprotagonista en las películas The Rally (estrenada en el 2009) y The Rally 2: Rompiendo la Maldición (estrenada en el 2016), en su papel de padrino hispano.
Con la ayuda de su equipo y oficinas en los Estados Unidos, Canadá, Inglaterra, Australia, Sudáfrica, Ucrania, Singapur, y la flamante inauguración de la oficina para Latinoamérica en Colombia, Kenneth está cumpliendo su visión de predicar con valentía la Palabra incorruptible de Dios desde la cima más alta hasta el valle más profundo, y en todos los confines de la Tierra. Su ministerio alcanza a millones de personas en el mundo por medio de programas televisivos semanales, revistas, mensajes en audio y video, convenciones y campañas, y a través de la red mundial internet.