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¡ESTA ES LA VICTORIA! Parte 2

mayo 2020

Apreciado(a) Colaborador(a),

Comenzaré esta carta con un cronograma. Hoy es 20 de marzo, pero probablemente no recibirás esta carta hasta finales de abril. La Pascua, un día muy significativo en las Escrituras, se habrá celebrado el 8 de abril.

El domingo pasado, el 15 de marzo, después de asistir a la iglesia por la mañana, Gloria y yo nos pusimos de pie en el porche de la casa frente a la puerta de ingreso, y rociamos la SANGRE del Cordero de Pascua de manera simbólica en la parte superior y a los laterales de la misma, al igual que los hijos de Israel fueron instruidos en Éxodo 12:5-7, 13:

5 El animal debe ser macho, de un año y sin ningún defecto, y lo tomarán de las ovejas o de las cabras.

6 Lo apartarán hasta el día catorce de este mes, y toda la congregación de Israel lo sacrificará entre la tarde y la noche.

7 Tomarán un poco de sangre y la pondrán en los dos postes y en el dintel de las casas donde lo vayan a comer.

13 Y cuando hiera yo la tierra de Egipto, la sangre en las casas donde ustedes se encuentren les servirá de señal, pues yo veré la sangre y seguiré adelante, y no habrá entre ustedes ninguna plaga de mortandad.

Ahora mira el versículo 23:

23 …cuando él [SEÑOR] pase y vea la SANGRE [DEL CORDERO] en el dintel y en los dos postes, pasará por alto aquella Puerta [entre las casas] y no dejará que el ÁNGEL EXTERMINADOR [COVID-19] entre en las casas de ustedes y los hiera. ¡GLORIA A DIOS!

El viernes 13 de marzo por la noche, Gloria y yo estábamos en la cama escuchando un mensaje de Kenneth E. Hagin. A las 9:24 pm, la palabra del SEÑOR vino a mí, diciendo:

Esta enfermedad llamada CODVID19 terminará mucho antes de lo que te imaginas. Los cristianos de todo el país que oran ya la han abrumado. Dame toda la gloria, dice el Espíritu de Gracia. Y mucha,

mucha gente llegará a conocerme a través de él. ¡Todavía soy el Señor sobre esta nación, y estoy en el trono y la fe en Mí cambia las cosas!

Agreguemos este poderoso versículo de Proverbios 18:14:

14 El espíritu fuerte de un hombre lo sostiene durante los problemas o en medio de dolores corporales, pero un espíritu débil y quebrantado, ¿quién podrá animar o soportar? (Biblia Amplificada, Edición Clásica)

Una persona con un espíritu fuerte es aquella que se enfoca en Jesús y Su PALABRA para todo aspecto en la vida : en espíritu, alma, cuerpo, financiera y socialmente. ¿Recuerdas 1 Tesalonicenses 5:23, una de las escrituras que oramos al final de estas cartas y declaramos sobre todos nosotros?

Veámoslo:

23 Que el mismo Dios de paz los santifique por completo; y que guarde irreprensible todo su ser, espíritu, alma y cuerpo, para la venida de nuestro Señor Jesucristo.

Óralo como lo acabo de escribir: en espíritu, alma, cuerpo, financiera y socialmente . Una persona que tiene un espíritu fuerte busca en Él todo lo que tiene que ver con la vida y la santidad.

Leamos 2 Pedro 1:3-4:

3 Todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia.

4 Por medio de ellas nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas ustedes lleguen a ser partícipes de la naturaleza divina, puesto que han huido de la corrupción que hay en el mundo por causa de los malos deseos.

Es cuando te envuelves (o rodeas) de las promesas de Dios cuando Su PALABRA comenzará a impulsarte.

La palabra del SEÑOR llegó a Gloria hace algunos años, y ella escribió esto: la fe es el recurso, el poder y la habilidad de recibir la habilidad sobrenatural de Dios en tu espíritu, alma, cuerpo y en toda circunstancia de la vida. La fe cambia toda situación cuando es aplicada . La fe libera de la maldición de la enfermedad, la confusión, la pobreza y la tristeza. Esto ciertamente incluye nuestras vidas personales, pero también la vida y la sanación de esta nación del ataque de la enfermedad; no solo en este país, sino en todo el mundo.

“Hermano Copeland, ¿es el virus COVID-19 algún tipo de juicio divino?”

Contestaré esa pregunta con las palabras de Jesús en Mateo 24:6-7 (RVR-1960):

6 Y oiréis de guerras y rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin.

7 Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá pestes, y hambres, y terremotos en diferentes lugares.

La palabra griega traducida pestes también se traduce como plaga. Recuerda: acabamos de presenciar en África una plaga de langostas a principios de este año. Estamos en el tramo final de los últimos días. Pero la buena noticia reside en lo que Jesús dijo en el versículo 14:

14 Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin.

Eso es lo que estamos haciendo en medio de semejante calamidad. Presta atención. Este terminará siendo el mejor momento de este país. Estoy citando a una amiga muy querida y de confianza que vio a Jesús en una visión en marzo de 2009. Jesús le dijo: Los Estados Unidos de América se fundaron porque la gente me amaba y buscaba crear una nación donde pudieran tener libertad para adorarme. ¡ NUNCA OLVIDARÉ ESO !

El presidente Donald Trump se ha convertido en un presidente de guerra. Sin embargo, esta guerra es una guerra contra principados, poderes, gobernantes de la oscuridad de este mundo y espíritus malignos en los lugares celestiales (Efesios 6:12). ¡ Gracias a DIOS , el presidente Trump es un hombre que ama a Dios! Él mismo dijo que quería ser recordado como el presidente que más hubiera orado en la historia de los EE. UU . El vicepresidente Mike Pence dirige grupos de oración en la Casa Blanca todos los días. La asesora espiritual personal del presidente Trump, Paula White-Cain, es una guerrera de oración. ¡Esta nación está en buenas manos!

Para finalizar, mientras siembras tu semilla de BENDICIÓN en este ministerio, oremos juntos una oración que fue musicalizada ya hace muchos años: “América la bella”.

¡Oh hermosa de cielos espaciosos,
con olas de grano de ámbar,
Desde las majestades de montaña púrpuras
sobre la llanura frutal!
¡América! ¡América!
¡Dios derramó Su gracia sobre ti
Y los coronaré con bondad con [kcm_double_underline]LA SANGRE DE JESÚS[/kcm_double_underline],
¡de costa a costa y frontera a frontera!”

Repítelo conmigo: “¡TODO ESTARÁ BIEN PARA LA FAMILIA DE LA FE!”

Nunca olvides que yo, junto con todos los departamentos de este ministerio, oramos por ti todos los días. Dios te ama. ¡Te amamos y Jesús es el SEÑOR!

                  Con amor,

 

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