Dios te necesita ungido – por Kenneth Copeland
Todo comenzó con un sermón: «El Espíritu del Señor está sobre mí. Me ha ungido…» (Lucas 4:18). Ese mensaje “ungido” fue lo que catapultó a Jesús en el ministerio. Fue el corazón de todo lo que…Más…
Todo comenzó con un sermón: «El Espíritu del Señor está sobre mí. Me ha ungido…» (Lucas 4:18). Ese mensaje “ungido” fue lo que catapultó a Jesús en el ministerio. Fue el corazón de todo lo que…Más…
(Enseñanza clásica publicada originalmente en Noviembre del 2004) No todas las batallas espirituales son iguales. Algunas son pequeñas peleas que se ganan fácilmente y quedan en el olvido; otras, por el contrario, son peleas feroces en…Más…